26 dic 2010

EN MIS ENTRAÑAS



Somos seres distantes. Somos seres distantes, sí, difíciles, y por eso siempre nos observaremos desde lejos mientras pasan por nuestras mentes diapositivas que nunca salieron de ellas. Miles de veces soñamos en compartir lo que hay dentro de nuestro maldito cráneo, ese puto volcan en erupción que no nos deja nunca en paz, nunca tirados en un árido solar para pudrirnos y dejar de conocer. Soñaba en encontrar alguien como tú para hacer una grieta en él, ver cómo tu la haces en el tuyo, y así dejar que la lava fluya sedienta hasta ser dos afluentes por fin. Creando, siempre creando todas esas cosas que se acumulan como obsesiva enfermedad por el simple hecho de que ya no pueden desaparecer. No se ha de entender puesto que no podemos. Y todo queda atrapado bajo mi piel, no transpira nada, nótalo tú, tú que sabes como soy yo porque nos hemos encontrado y sólo queríamos el Ideal. Sabes que no nos podemos pedir explicaciones, no, tu y yo no, tu y yo mejor que no las sepamos, sólo las escucharemos en esos pensamientos de novela que aparecen de manera intermitente y vergonzosa. "No te entiendo". Todo roto, tú acabas de romperlo todo. Ya no hay espejo. Y así te has despedido, así te has muerto, te has desplomado en mis brazos y no has pensado en cómo voy a ser capaz de aguantar tanto peso. Creía que éramos estáticos en un mundo de coches y semáforos sicronizados, sordos ante el marcaje de números de teléfono de amigos consejeros. Tantas noches que dormíamos abrazados, sólo abrazados, carismáticamente, desesperadamente, los dos únicamente abrazados en el desvan. (Me) decías "Bona nit. Tens fred?". Yo sonreía y ahora ya no estoy segura de que entendieras que no es qüestión de que hiciera o dejara de hacer frío, que yo soy el frío y nunca me ha molestado estar cubierta por una gran placa de hielo que me impide de manera inamovible girarme y pedirte que hagámos el amor mientras te aguanto la mirada, todo el rato, y dejo que me empape tu deseo insaciable, tu rostro de descubrir un nuevo sentimiento al que nostros no, no y no, no podremos nunca ponerle palabra. Quería que me miraras hasta que creyera que me lo merezco. "No, no te entiendo". Tic-tac, tic-tac. Necesito hablar, però no en sé. Espero que t'hagis adonat que m'ofego i que per això no t'ho puc dir. Torna. Si us plau.

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Qué entrada más bonita :) sobre todo si se acompaña de eros y psique! ;) salut!

    ResponderEliminar